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viernes, 21 de noviembre de 2008

Nuestros autores: Antonio Polo

(Córdoba, 1974) Los primeros años de vida de la criatura estudiada carecen de ningún valor etnológico o antropológico válido, por lo que podemos obviar las consabidas fases de nacimiento, crecimiento y embotellamiento de la personalidad del individuo, y centrémonos en el momento principal de la infección viral que lo convirtió en el desecho social en que se ha convertido en el día de hoy (siempre en el mejor sentido de la palabra desecho: “Lo que queda después de haber escogido lo mejor y más útil de una cosa”), y es precisamente cuando, convaleciente de una operación múltiple de ligamentos en una rodilla fruto de un accidente al jugar en el patio del colegio (que manda narices, por cierto), reúne el valor necesario para acabarse por fin El Señor de los Anillos, y en el momento justo en que el bueno de Sam Gamyi le dice a su parienta aquello de “otra vez de vuelta”, al señor Polo le hace clic en vez de clac algo en el cerebro y se nos transforma en fan letal para lo que le queda de vida.

Y claro, una cosa le lleva a la otra, y tras devorar uno tras otro los librojuegos de Altea Junior, se queda sin carnaza que echarse al estómago, pero un amigo le habló de un juego en el que “si quieres, puedes irte a echar la primitiva si te viene en gana”, lo que en vez de producirle una violenta reacción jocosa, como le hubiera sucedido a cualquier persona cuerda, sólo consiguió aumentar su curiosidad, que no se vió saciada hasta que convenció a unos amigos —consulte los expedientes c101 a c115 para más información— para dirigirles RuneQuest. Desde entonces, la vida de este subproducto social ha sido un ir y venir de diferentes sustancias roleras, algunas de ellas especialmente peligrosas y dañinas, como Ars Magica, Mutantes en la Sombra, Ragnarok, Mago, Vampiro, Fanhunter, Aquelarre, El Capitán Alatriste, y algunas más de las que no guardamos constancia en estos momentos.

Hasta aquí la situación se hubiera mantenido estable, como sucede en la mayor parte de los individuos estudiados, en la que el matrimonio o el cambio de ambiente causa una degradación paulatina de la adicción hasta que desaparece o se mantiene a niveles “controlables”, pero en el caso del señor Polo, me temo que la adicción alcanzó altas cotas de peligrosidad: tras mantener viva parte de la célula de juego original e incorporar a ella a las esposas de los propios integrantes (fijesé hasta que extremo llega la degradación del sujeto), el individuo estudiado comenzó a propagar sus ideas en diferentes publicaciones afines escritas por uno de los gurús terroristas del subproducto rol, R. Ibañez (consulte el enorme expediente c001), dentro de la linea Aquelarre y El Capitán Alatriste, llegando incluso a escribir su propio ideario proselitista, Descriptio Cordubae, a reunir las principales ideas de algunos de los cabecillas del movimiento en un libelo denominado Aquelarre Apócrifo, y a dirigir un fanzine subversivo y anarquista llamado Los Papeles del Alférez Balboa.

No contento con eso, Antonio Polo ha traspasado el límite de lo humanamente soportable y ha escrito, en colaboración y connivencia con R. Ibañez, una tercera edición de Aquelarre, el juego de rol demoniaco medieval, que publicará en breve la editorial sediciosa y subversiva llamada NoSoloRol. Este hecho, unido a sus reiteradas promesas de no abandonar esa linea de degradación medieval, además de asegurar a varias de sus amistades que desea recuperar viejos juegos inquisitoriales (sea lo que sea eso), nos hacen solicitar en firme la ejecución inmediata del sujeto o, en caso de no ser posible, su lobotomización urgente.

5 comentarios:

Selenio dijo...

¡Madre mía! ¡Telecinco estaba en lo cierto, el rol es malísimo!

XD

Selenio.

P.D: Mucho rollo jocoso pero no ha soltado ni una perlita pequeña del nuevo Aquelarre... fijo que forma parte de una conjura judeo-masónica-anarco-falangista cuyo objetivo es mantenernos en ascuas.

Anónimo dijo...

¿Los Papeles del Alférez Córdoba? ¿Quién ese ese? Por Dios, no me digan que es el loco ese de la foto con el yelmo ;)

Anónimo dijo...

¿Pero ese no el yelmo de goma que regalaban con la peli de 300?

La verdad es que el nuevo Aquelarre tiene una pinta estupenda, por lo que he leído en el foro. Casi seguro que entrará en mis compras roleras del año que viene, junto con Eyes Only.

Aquilifer dijo...

Jajaja... ha sido la descripción más divertida de todas las de los ilustres padres de NSR. Sin contar con que la foto tiene bastante miga... quien iba a decir que había berserkers griegos :D

Boni dijo...

Madre miaaaaa. Y pensar que lo conozco personalmente.... si ya me lo decia mi madre, es lo que tienen las malas compañias.