Todos conocemos, al menos a grandes rasgos, la historia de Harry Potter: hijo de magos, pero críado por sus tiránicos tíos debido al asesinato de estos a manos del malvado Lord Voldermort, Harry tiene el potencial de convertirse en el mayor mago del mundo, por lo que es invitado a ingresar en la escuela Hogwarts de Magia y Hechicería, donde año tras año se enfrentará a la amenaza del regreso de Voldemort mientras va descubriendo los secretos que envuelven al asesinato de sus padres y a la guerra mágica que parece condenada a repetirse. Todo esto, claro, mientras hace cosas de niño normal, estudia para las clases, hace amigos y enemigos entre sus compañeros del cole, comienzan a gustarle las chicas y todo eso.
En fin, una historia ya por todos conocida, con sus elementos originales y con un Universo bien construído que puede ser uno de los pilares de su éxito. Pero no estamos aquí, aunque lo parezca, para hablar de Harry Potter, sino para hablar de qué puede hacer Harry Potter por nosotros y nuestras partidas. Y puede hacer bastante.
A quién más y a quién menos seguro que a todos se nos ha pasado por la cabeza la idea de montar unas partidillas de Harry Potter con nuestro sistema genérico favorito. El problema es que ser un alumno más en Hogwarts mientras Harry y compañía cortan el bacalao mola infinitamente menos que estar en el centro del asunto. Y claro, juegar los acontecimientos de Hogwarts tal cual salen en los libros o las pelis le quita miga al asunto, pero ¿y si trasladamos la trama de Harry Potter a alguna ambientación completamente ditinta donde podamos hacer lo que nos plazca?
Por ejemplo, pensemos en Mutants & Masterminds. los personajes son hijos de superhéroes que acuden a la academia Claremont. Uno de ellos, un niño aparentemente normal que ha sido criado por sus tíos porque sus padres murieron en un accidente, recibe la invitación de ingresar en la academia. ¿La razón? Naturalmente el niño es en realidad un mutante (o similar) y sus padre fueron dos poderosos héroes de Freedom City, hecho que sus tíos han ocultado al niño convenientemente. Todo ocurrió durante la Guerra de los Héroes, cuando Shadowmaster y otro héroes que le apoyaron trataron de hacerse con el control del mundo para gobernarlo y hacerlo "un lugar mejor" a cualquier precio. El resto de los héroes les combatieron, pero Shadowmaster y compañía eran poderosos y contaban con el apoyo de varios villanos, lo que resultó en muertes y otros acontecimientos funestos, que poca gente recuerda ya que hubo disrupciones temporales y otros acontecimientos full color implicados. Pues bien, el niño mutante y sus amigos asisten a clase, corren aventuras y van descubriendo la verdad sobre lo ocurrido y como Shadowmaster, al que se cree muerto, planea volver. Imagináos al siniestro profesor Nightcrawler, un antiguo villano redimido que parece tenerla jurada con los PJs. O las competiciones nacionales (e internacionales) de deportes para superhumanos adolescentes. Además, como el género de los superhérores nunca se ha privado de incluir elementos de magia y fantasía, algunos aspectos podrían trasladarse tal cual.
¿Véis por donde van los tiros? Tenéis campaña para rato y aunque tus jugadores terminen oliéndose el pastel tienes libertad absoluta para introducir los giros en la trama que quieras sin que nadie te diga "Pues en la Orden del Fenix no es así". Tal el vez el bondadoso director de la academia resulte ser finalmente Shadowmaster o puede que este no fuera realmente el responsable de la muerte de los padres del niño...
¿Y trasladar la historia a una galaxia muy, muy lejana, para que ocurriera hace mucho, mucho tiempo? En la Academia Jedi de la Antigua República, un joven niño hijo de dos poderosos Jedis que fallecieron durante las guerras Sith a manos del malvado Lord Tenebrus comienza sus estudios para seguir los pasos de sus padres. Allí se va enterando de todo el percal en compañía de sus amigos, incluyendo que alguno de los profesores de la Academia apoyó el alzamiento de los Sith pero fue traído de vuelta al lado luminoso antes de que acabara el conflicto. Mientras, Lord Tenebrus, cuyas enseñanzas han quedado contenidas en un Holocron, ejecuta cuidadosamente un plan maestro para provocar un nuevo alzamiento Sith y destruir a los odiados Jedis para siempre. Aquí podríais meter al simpático profesor de Defensa contra el Lado Oscuro, que realmente es el nuevo poseedor del Holocron y contaminado por Lord Tenebrus busca influir con enseñanzas poco ortodoxas en los jóvenes personajes.
En Roleage, los personaje serían alumnos de una escuela de evocadores. Una ocasión muy propicia para jugar con personajes de grado cría (como se describe en Hijos de Geos) y ver como evolucionan casi, casi desde la cuna. Competiciones de Laberinto, enfrentamiento con bestias esenciales y otros sucesos semejantes pueden ser trazados en paralelo con momentos clave de la saga de Potter con bastante facilidad. El eje central de la historia podría girar entorno a un poderoso Tyrlin oscuro y los terribles sucesos de su auge y su caída durante la Era de las Sombras. Por supuesto, su regreso en forma de espectro astral de oscuridad sería la fuente de conflicto de la campaña, con los personajes enfrentándose a mayores peligros conforme crecen en edad y poder. La escuela podría estar dirigida por una sabio y bondadoso Willen, mientras que el portero es un descomunal Coloso al que todos temen, pero que pronto demuestra a los PJs tener un corazón de oro.
Incluso, si estáis dispuestos a hacer un salto conceptual mayor, podemos llevar la historia a otras ambientaciones en las que el componente sobrenatural esté fuera de lugar. En sLAng, la acción podría comenzar en una academia de policía de Los Ángeles y continuar en una comisaría. El padre de uno de los personajes fue un policía asesinado en acto de servicio, una persona muy querida en el cuerpo. Pero ahora que el hijo está aquí, empiezan a abrirse viejas heridas y el hijo y sus compañeros pueden descubrir que en realidad el padre fue asesinado por policías corruptos que controlaban el departamento (o que tal vez aún lo controlan) y que viven impunes sin que Asuntos Infernales haya logrado echarles el guante. El mentor de los personajes (el equivalente al maestro de Defensa contra las Artes Oscuras) será un detective con pocos escrúpulos que también es corrupto y está dispuesto a vender a los personajes por unos pavos. Mientras, el equivalente de Snape aquí será un teniente de detectives que denunció la corrupción en su momento y testificó contra sus compañeros y ahora está socialmente marginado en el departamento, aunque goza de la simpatía del benévolo Capitán. Vale, aqui no habrá competiciones de quidditch pero sí barbacoas los domingos en los que se perfilaría en que lugar de la delgada línea azul quieren colocarse los personajes.
En fin, seguramente podría mencionar otros juegos de la casa y de fuera de ella, pero estoy seguro de que estos ejemplos han sido lo bastante ilustrativos. ¿Se os ocurren más?
5 comentarios:
Sensacional trama argumental en cualquiera de sus posibles ambientaciones ;), y tanto :P
Jue, una muy buena idea de cómo trasladar algo que tenemos delante todos los días hasta nuestros juegos de cabecera. ;)
Joooder hermano, mira que nunca se me había ocurrido pensar en el buen amigo Harry para partidas en otras ambientaciones. Y mira que me parece una muy buena idea, sí señor.
Muchas gracias por abrirnos los ojos!
pues sí, interesante plateamiento. tomo nota, a ver que puedo hacer con la Canción de Hielo y Fuego :P
Genial articulo, genial idea. Felicitaciones al que lo escribio, me encanto.
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